Applied Science, Inc. (ASI) se fundó en 1991 en Grass Valley, California, con objeto de desarrollar tecnologías médicas avanzadas cuyo uso fuera más sencillo, fácil y seguro. Esto condujo a la invención de un mezclador de sangre y una báscula para las organizaciones de almacenamiento de sangre. ASI lanzó al mercado su primer producto, HemoFlow 200, y rápidamente lo siguió con el HemoFlow 300. En 2008, ASI presentó un producto de tercera generación llamado HemoFlow 400XS, que hoy en día se utiliza en bancos de sangre en todo el mundo. ASI está entrando en el entorno hospitalario con soluciones de software diseñadas para reducir los errores de entrada de datos humanos y los procesos duplicativos.